El pobre es pobre porque quiere

Dicen los motivadores y los pregonadores de positivad positiva, casi siempre lo dicen con ejemplos presentados como reales de historias de éxito de uno entre un millón. Y aunque algunas historias no sean reales o al menos no al 100% la verdad es que les creo.
Si, vivimos en una meritocracia nepotista, eso no lo voy a negar, pero dígame alguno de ustedes: ¿Les parecería justo no poder heredar todo lo que hayan podido lograr en la vida?
¡Ah verdad!
¿Y los que no heredamos?
Pues nos toca trabajar más para poder lograrlo; no hay salidas fáciles ni milagrosas, hay que sembrar para cosechar, hay que estudiar para titularse, o lambisconear para poder ascender en la empresa.
Eso o sacarse la lotería, bueno suerte con eso, de verdad.
Ya que si ninguna de esas les gusta, hay que pegarle al emprendurismo, pero pegarle de a de veras, aguantar un ratote reinvirtiéndole, renovándose e innovando, que hasta ir a comprar paletas y revenderlas en la plaza es una forma de emprendurismo.
¡Pero no! Les parece más fácil seguir sin hacer nada y postear en sus redes que es culpa del gobierno y de sus sueldos bajos.

En 2007 Z gas tuvo una huelga de empleados, quienes demandaban mayor sueldo y ofrecían dejar de ordeñar cilindros, justificándose con que lo hacían debido a sus bajos sueldos.
¿Qué hizo la compañía?
Despidió a toda la planta y la volvió a llenar con empleados a menor sueldo.
La moraleja aquí es que allá afuera habrá alguien quizás más capaz que uno para realizar el mismo trabajo aun por un menor sueldo.
Así como uno puede decir que allá afuera habrá otra compañía quizás mejor, que nos pague más sueldo por el mismo puesto.

¿Y si quieren cambiar al gobierno?
¿Faltar a trabajar para hacer una marcha? No gracias, el patrón me descuenta el día, y de paso mi bono de puntualidad. Mejor me gradúo, trabajo al 110% y le chupo las bolas a mi supervisor a ver si me dan el aumento en la empresa. Si no, pues me voy a la competencia.
Que al menos en este México lindo y jodido, una vez que tenga más dinero puedo usarlo corruptamente para desobedecer las reglas que no me gusta obedecer.
Que así funciona este país y el único dios verdadero es don dinero, y me parece más fácil, aun con su nepotismo, clasismo, burocracia y meritocracia, me parece más fácil poder generar dinero por mi cuenta, que intentar cambiar el sistema

Los 12 pasos de los alcohólicos apocondriacos

1 Admitimos que éramos impotentes frente al alcohol,
que nuestras vidas se habían vuelto ingobernables.

Derrotarse, des responsabilizarse de la adicción de uno y culpar a la sustancia en lugar de los vacíos emocionales que nos llevaron a abusar de ella, esto es: lavarse las manos y echarle la culpa al alcohol.

2 Llegamos a creer que un Poder Superior a
nosotros mismos podría devolvernos el sano juicio.

Teísmo y religiosidad disfrazada. Siguiendo el camino de la des responsabilización, en lugar de trabajar a uno mismo, entregarse a una fuerza mágica cósmica.

3 Decidimos poner nuestras voluntades y nuestras
vidas al cuidado de dios, como nosotros lo concebimos.

Nada que agregar, tal cual, entrar a la secta de doble AA, como sea que lo conciban ellos.

4 Sin miedo hicimos un minucioso inventario moral de nosotros mismos.

Este debiera ser el primer paso, no sólo en las adiciones, en la vida diaria

5 Admitimos ante dios, ante nosotros mismos, y ante otro
ser humano, la naturaleza exacta de nuestros defectos.

De nuevo entregarse a un moralismo religioso teísta, y aunque admitir los defectos es el inicio de cualquier mejora, no basta con admitirlos, es necesario agregar un plan de mejora

6 Estuvimos enteramente dispuestos a dejar que
dios nos liberase de todos estos defectos de carácter.

Y siguen con su religiosidad… nada más que agregar.

7 Humildemente le pedimos que nos liberase de nuestros defectos.

¿Esto se trata de superar una adición, mejorarse a sí mismo, o es otra religión (secta)?

8 Hicimos una lista de todas aquellas personas a quienes habíamos
ofendido y estuvimos dispuestos a reparar el daño que les causamos.

Difícilmente uno pudiera recapitular todo el daño que ha hecho, y aun así: hay daños irreparables, uno no revive a gente que mató por andar manejando borracho, sin contar que muchos ofendidos no perdonan nada más porque uno regrese aseado y rasurado y ponga cara de puerca babosa y ofrezca perdón.

9 Reparamos directamente a cuantos nos fue posible el daño causado,
excepto cuando el hacerlo implicaba perjuicio para ello o para otros.

¿De qué manera el reparar el daño causado puede implicar perjuicio? Asumo que de aquí se anclan muchos que no quieren reparar el daño.

10 Continuamos haciendo nuestro inventario
personal y cuando nos equivocábamos lo admitíamos inmediatamente.

Lo que se mencionó del punto 4, hay que hacerlo diario

11 Buscamos a través de la oración y la meditación mejorar
nuestro contacto consciente con Dios, como nosotros lo
concebimos, pidiéndole solamente que nos dejase conocer
su voluntad para con nosotros y nos diese la fortaleza de cumplirla.

El hecho de que se le agregue el “como lo concebimos” no deja de ser menos sectario, se está dando por sentado, afirmando que exista un ente, un alguien superior al cual entregarse, de nuevo: programación religiosa sectaria adoctrinamiento y re educación.
¿Y qué hay de quienes conciben a un dios como algo inconcebible o inexistente?

12 Habiendo obtenido un despertar espiritual como resultado
de estos pasos, tratamos de llevar este mensaje a los alcohólicos
y de practicar estos principios en todos nuestros asuntos.

Al igual que los cristianos y católicos: al creerse superiores moralmente se sienten con el derecho de juzgar, reprobar, censurar, discriminar y rechazar a quien no piense como ellos, contrario al primer mandamiento satanista:  No des tu opinión a menos de que te sea pedida.

¡Salud!

Publicidad y mercadotecnia

Basta con mirar un antiguo comercial en la tele para ver el inicio del declive humano.
En aquellos entonces, la señora tomaba la botella de cloro y hablaba a la cámara acerca de los beneficios y ventajas del producto, desde un marco aparentemente objetivo y con las intenciones más lógicas de mostrar el producto y justificar el porqué hay que comprarlo en lugar de comprar el de la competencia.
Ahora, en contraste: la publicidad nos invade de formas subliminales atacando nuestras emociones irracionales que no van a entender porque ver a Belinda cantar en la calle hace que se me antoje una coca zero. ¿Qué decir de la esposa y el esposo revolcándose por el suelo oliendo el fabuloso?
Ya ni hablar de esos comerciales random, extraños, psicodélicos, eróticos, y hasta artísticos que no tienen nada que ver con el producto y que vemos ya no como mercadotecnia, sino como mismo entretenimiento.

Y todo por culpa de Edward Bernays…

Porque antes podía uno intentar convencer, ofrecer una especie de tesis, dar un punto, argumentarlo y justificarlo.
Edward Bernays vino a cambiarlo todo:
Es más fácil seducirte que convencerte, porque las emociones son irracionales, son impulsos imperativos que muchas veces, si uno no se conoce a sí mismo, ni siquiera puede dominar.

Y lo peor es que no sólo se pueden vender bienes y servicios, las ideas también se venden: tal cual un doblepensar orwelliano, programación neurolingüística, chantajes emocionales y demás triquiñuelas que las pirámides multinivel, el catolicismo, o cualquier político utiliza actualmente.
Basta con leer cualquier artículo de Alex Ley para saber que la humanidad es tan estúpida que puede comprar lo que sea, específicamente le dio prioridad a las emociones en lugar de la razón, entregándose a su hemisferio cerebral más débil, MÁS DEBIL, pues porque es más cómodo supongo.

A casi cien años posteriores al trabajo de Edward Bernays, tenemos un mundo donde ligeramente se habla de sembrar necesidad, sembrar necesidad, como su misma campaña de convencer a las hembras misandrias que fumar tabaco cancerígeno iba a ayudarles en su lucha contra el patriarcado opresor.
Y aquí estamos, consumiendo cosas que no necesitamos, no requerimos, no podemos pagar y muchas veces, incluso son dañinas para nosotros.

Edward Bernays se dio cuenta que era más fácil programar, dominar y educar a los humanos atacando sus emociones en lugar de la razón, por eso: por más que se nos muestre evidencia tangible, fehaciente y a prueba de toda duda; aún así hay gente que no va a creer.

Regresando una vez más de nuevo a los básicos:
Un mundo feliz de Huxley era feliz porque habían usado la razón por sobre las emociones.
En cambio: 1984 de Orwell nos muestra la otra cara de la moneda, parafraseando a Winston Smith:
“Hasta que no tengan consciencia de su fuerza, no se rebelarán, y hasta después de haberse rebelado, no serán conscientes.
He ahí el problema.”

Es esa la dicotomía en la que encuentro a la humanidad actual.
Y es por eso que los detesto y aborrezco a todos por igual.

La fealdad post Umberto Eco

El monopolio de banco azteca tiene, o tenía, esta historia es vieja, una fundación en beneficio de víctimas de incendios. Ellos mencionaban en una entrevista: que más allá del trauma y las heridas, o las costosas operaciones de injerto de piel, una de las principales consecuencias era la discriminación y el rechazo que sufrían por parte de la sociedad.
Decía uno de sus beneficiarios que no le daban trabajo porque la gente le rehuía.

Nos han enseñado desde pequeños a no temer a la gente deforme, repulsiva o desagradable, nos educan a no sentir repulsión por lo repulsivo, a no sentir asco por lo asqueroso; nos educan a ir en contra de nuestro instinto, como educamos a los perritos a no orinarse y no macar territorio, o como educamos a los gatitos a no rascar los muebles afilándose las uñas.

En esta entrevista una de estas víctimas decía que no tenía por qué usar máscara, que detestaba esconder su cara de la gente, y odiaba que le juzgaran por su apariencia sin conocerle, como si fuera un defecto que la gente que no le conocía se dejara llevar por su aspecto de pintura expresionista grotesca infernal.

Entonces banco azteca lanzó una campaña de contratar a esta gente, para que atendieran las tiendas Elektra, para educarnos a que son víctimas, a lo mejor víctimas de su propio pendejismo, pero víctimas, al fin y al cabo. Y para brindarles trabajo que la sociedad les negaba, discriminaba, censuraba, excluía y rechazaba.

¿Y por qué nadie sabe de esto? ¿Dónde están esos vendedores de Elektra que tienen cara de Johnny Storm?
Pues porque la fundación tuvo que desistir al ver que la gente entraba a Elektra y se asustaba al verlos y se iba sin comprar, sin ventas de Elektra, no había dinero para costearles sus curaciones, y sin ventas no había necesidad de crear asociaciones civiles para evadir impuestos. Que eso de hacer caridad para no pagar impuestos, no es algo que me moleste de hecho, será otro tema para otra ocasión.

La realidad es que por más buenas que fueran sus intenciones, el único dios verdadero es don dinero, y la gente no se reeduca en un par de años, ni en un sexenio o dos.
A Jesucristo le costó casi un siglo para hacerse leyenda y que Gregorio pusiera su fecha de nacimiento como calendario global, un par de siglos más, y apenas se comenzó a propagar en el mundo, ya para el medioevo en los siglos XIII o XIV o corríjanme los letrados y eruditos: fue para cuando se consolidó el cristianismo más o menos como lo conocemos hoy.

Ternuritas de banco azteca queriendo ir en contra de nuestro instinto animal de supervivencia y aversión o repulsión a la fealdad.
kudos por sus intenciones de todas maneras.

Ted Bundy fue exitoso en atraparlas no sólo por carismático, el carisma las enganchaba, pero para eso tenían que acercarse y para eso usaba su atractivo, osease de la atracción, que atrae pues: semántica.

Así como las chichonas venden más en las tiendas. Y por eso contratan más a las sabrosas que a las gordas, sobre todo cuando requieren “buena presentación” Y no digamos ya las edecanes, que su trabajo es tal cual nomás estar ahí, ser bonitas y sonreír.

Más allá de los cánones establecidos, que si los niños nerds crecieron viendo a Gokú y Superman y se inspiraron a ponerse fuertecitos, no como las gordas que siguen estando gordas y pretenden reeducar a la sociedad diciendo que la muñeca Barbie las traumó y que debemos aceptar su gordura.

Claro que billete mata carita y verbo mata billete, pero para que se acerquen, como con Bundy, una cara bonita es una ventaja. Además, la reestructuración del cuerpo es relativamente fácil, no es necesario una cirugía plástica, un poco de disciplina dieta ejercicio y aseo personal hacen la diferencia, ya si no se quita lo feo, se quita lo repulsivo, y con eso ya tiene uno ganado el primer paso para meter la personalidad, que al final es lo que realmente importa, porque sí, una sabrosa mamona o un papirrín patán, nomás sirven para verse bien y ya, hasta ahí. Y aunque digamos que todo es relativo y subjetivo, no debemos olvidar que aún estamos limitados a nuestros instintos y hemos sido educados/programados por esta sociedad.
Para concluir: lo feo está feo pues, por definición. Semántica mis niños, semántica.